El ser humano está pasando por cambios fuertes, no solo aquellos que tienen relación con su entorno físico sino los que están afectando su visión de la vida, sus pensamientos más antiguos sobre cualquiera de los temas que se viven hoy a diario y por su educación lineal y tradicional, por su herencia cultural, muchos presentan una resistencia al cambio de paradigmas que están ocasionando en su cuerpo una lucha interna.
El cuerpo físico es
la última estructura del ser humano en verse afectada, es la que manifiesta si
hay caos interior, resistencia, decepción, amargura, frustración, rabia, dolor,
miedo, angustia, ansiedad, tristeza, soledad, todas estas emociones de baja
vibración o, como suelen llamar algunos, emociones negativas.
Cuando nuestro
cuerpo físico manifiesta dolencias, enfermedades graves o crónicas, es una
evidencia de que nuestro cuerpo emocional lleva algún tiempo luchando
internamente, resistiéndose a cambiar paradigmas o sumergido en la duda entre
sus pensamientos y sus emociones, reprimiendo sentimientos u ocultándolos.
Somos seres
integrales: nuestra mente, cuerpo y emociones se conectan, ellos hablan entre
sí, y cada uno de ellos cumple una función en el desarrollo del ser humano. Sin
embargo, desconocemos qué alternativas existen para sanar desde el interior y
ayudarle al cuerpo físico a no cargar con nuestras emociones convirtiéndolas en
enfermedad, pues es su sabia manera de decirnos que debemos resolver el
conflicto interno. Explorar nuevos conocimientos, desaprender y desinstalar
paradigmas nos permite curar nuestros cuerpos y sanar nuestras almas. Atrévete
a conocerte a ti mismo.
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